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Ser organizado ayuda a mejorar todos los aspectos de tu vida. Nadie quiere entrar a su habitación con ropa en el suelo, sábanas arrugadas y tazas de café errantes que abarrotan el lugar. Del mismo modo, cuando tu computadora está desorganizada o sucia, involucra más estrés para manejar durante el día.
Aprender a limpiar tu notebook es una habilidad importante que implica una cierta cantidad de delicadeza, ya que se trata de hardware delicado que puede salirse de su lugar o romperse fácilmente. Cuando estés limpiando el exterior de tu computadora, tené en cuenta que también es posible limpiar el interior de tu notebook. Tus espacios virtuales, de la misma manera, deben mantenerse ordenados y organizados, especialmente si te estás quedando sin espacio en el disco duro.
Echemos un vistazo a las diferentes formas en que podés limpiar tu computadora, desde limpiar la pantalla hasta eliminar aplicaciones innecesarias.
Si tu notebook funciona más lenta de lo habitual, es una buena idea solucionar algunos problemas. El primer elemento en tu lista debería ser revisar cuánto espacio libre tenés en tu disco duro. Para hacerlo en Windows®, debés abrir la aplicación "Esta PC" desde el menú de inicio.
Desde esta ubicación, navegá hasta el cuadro plateado etiquetado (C :), este es el almacenamiento de tu disco duro que te mostrará cuánto espacio está ocupado y cuánto está libre.
Cuando decidas limpiar tu disco duro podés usar el Liberador de espacio en disco. Con esta aplicación, podés eliminar archivos temporales, así como documentos y programas que ya no deseés. Para ahorrar espacio sin eliminar aplicaciones, tenés la opción de simplemente comprimir archivos.
Eliminar aplicaciones es otra forma de liberar espacio. Sin embargo, con este método, es fundamental que prestes mucha atención a lo que realmente estás eliminando para asegurarte de no eliminar permanentemente algo que necesitás.
El proceso de eliminación de aplicaciones no suele desaparecerlas de manera definitiva. Primero, son enviadas a la papelera de reciclaje y, posteriormente, podés elegir si deseas eliminarlos de forma permanente.
Un aspecto a recordar sobre la eliminación de elementos es que si envías los programas instalados a la papelera de reciclaje, los desinstalará de tu computadora y deberás reinstalarlos si cambiás de opinión.
Un ventilador polvoriento puede crear una contaminación acústica que te distraerá mientras trabajas. Si estás listo para tomar el asunto en tus propias manos, tenés algunas opciones disponibles para limpiar adecuadamente el ventilador.
La forma más fácil de limpiarlo es usar una lata de aire comprimido para sacar el polvo de las grietas. Si no tenés aire comprimido a la mano, podés limpiarlo sin él [1].
Estos son los pasos a seguir:
Una pantalla de computadora sucia puede ser una distracción importante cuando intentás ver una película, jugar o enviar correos electrónicos. El problema de limpiar la pantalla con cualquier producto doméstico es que se trata de un material sensible y frágil. Por ejemplo, algunos limpiadores pueden ser demasiado fuertes para tu pantalla y la dañarán.
Un consejo importante que debés recordar es evitar rociar un limpiador líquido en tu dispositivo. No querrás arruinar accidentalmente el hardware interno con aerosoles que puedan gotear en tu notebook.
Si no tenés una pantalla LCD, podés probar con una pequeña cantidad de alcohol isopropílico para quitar el polvo o las manchas rebeldes, pero solo lo suficiente para quitar un poco de suciedad. Si tenés una pantalla LCD, no uses alcohol isopropílico porque dañaras tu pantalla. Si no estás seguro, sé precavido y evita frotar el alcohol por completo.
Para limpiar la pantalla de tu notebook, seguí estos pasos:
El teclado de tu computadora puede ensuciarse fácilmente. Usás tu teclado todos los días, a veces con las manos sucias. Acumula gérmenes, aceites, suciedad, pelo de mascotas, alimentos y células muertas de la piel como resultado de su uso intensivo. ¡Qué asco! Estos son los pasos para limpiar correctamente el teclado:
Nota: En algunos modelos de notebooks, es probable que puedas quitar las teclas para obtener una limpieza más profunda; sin embargo, es mejor investigar tu modelo antes de hacer esto. Es importante que tomes una fotografía de la orientación de las teclas antes de comenzar a retirarlas. Podrías pensar que recordarás el orden, pero es fácil confundirse cuando comenzás a limpiar.