Gracias por visitar la tienda de MÉXICO HP
Gracias a la popularidad de las redes sociales, muchas de estas han evolucionado hasta llegar a ser no solo espacios para chatear con tus conocidos o ver fotos de gatitos, sino tiendas virtuales o sitios de citas.
El mejor ejemplo de este tipo de desarrollo es Facebook, que actualmente ofrece dentro de su plataforma una tienda virtual (Facebook Marketplace) y un sitio para parejas (Facebook Parejas).
Lamentablemente, la popularidad de la plataforma también atrajo a delincuentes que buscan aprovecharse de las facilidades que ofrece Facebook para conectar con desconocidos.
Las estafas en Facebook no son algo nuevo para la plataforma, ya que estas han estado presentes desde el inicio del sitio. De hecho, una de las búsquedas más comunes en Google es “cómo crear un perfil falso en Facebook” y el artículo de WikiHow que te enseña cómo hacerlo tiene más de 500 mil visitas.
Las estafas, en Facebook Marketplace, se han vuelto algo muy común, ya que la plataforma crea una idea de seguridad entre compradores y vendedores que es fácil de quebrantar. Actualmente, 1 de cada 6 usuarios de Facebook Marketplace es estafado.
A continuación te mostraremos los nuevos esquemas de estafas usados en Facebook Marketplace.
Esta es una de las estafas que más comprometen la seguridad de los usuarios de Facebook y funciona de la siguiente manera:
Estás buscando un nuevo departamento para rentar y la idea de ir caminando mientras buscas anuncios de “se renta” no te parece nada atractiva, por lo que entras a Marketplace y buscas “casa en renta”.
Miles de anuncios aparecerán a la velocidad de un clic y después de unos 5 minutos encuentras la casa de tus sueños: está a un precio razonable, en una buena colonia y tiene infraestructura moderna. Contactas al supuesto arrendador por medio de mensaje privado y te dice “Tengo muchos posibles compradores en este momento, si quieres que te ponga al inicio de la lista, podrías apartar con un mes de renta”.
En este momento, mucha gente prefiere no poner dinero sin tener algo seguro, pero muchos otros acceden y depositan la cantidad requerida. Después, el arrendador te pide que le mandes tus datos personales como copia de tu identificación, comprobante de domicilio y comprobante de ingresos; para así poder “hacer el contrato”.
Esto en realidad se trata de phishing, los estafadores buscan obtener tu información personal para que les sirva de identidad falsa para seguir estafando a otros.
Ya que el arrendador te dice que está listo el contrato, te cita en el domicilio que rentaste o compraste para poder entregarte las llaves. De antemano, te pide que pagues el depósito y que lleves el comprobante de pago. Llegas al domicilio y resulta que es propiedad de alguien más o no existe. Acabas de perder tu depósito, tus datos personales, el dinero para apartar el inmueble y no tienes el bien por el que pagaste.
Esta es otra de las estafas en redes sociales más comunes que podemos encontrar, y no solo en Facebook. Este esquema de estafa también está presente en Instagram, TikTok, Telegram e, incluso, Zoom.
En Facebook inicia de muchas maneras distintas:
La estafa continúa de la siguiente manera: la persona con un perfil falso te pide tu número de teléfono para comunicarse en privado. Comienza a mandarte fotos y audios para hacerte creer que estás hablando con la persona de las imágenes. Cabe mencionar que las fotos o la persona con la que crees que estás hablando, no existe o es alguien más.
La persona mostrará muchísimo interés en ti, te mandará mensajes todos los días y luego te dirá que le gustaría conocerte en persona. Lamentablemente, el estafador se hará pasar por alguien que vive en Estados Unidos, Canadá, Brasil o cualquier parte del mundo, y te dirá que tiene muchas ganas de verte; pero que no tiene el dinero para hacerlo. Aquí el estafador te pedirá que le transfieras dinero para cumplir el sueño de estar juntos, te dirá que el dinero es para el boleto de avión, pasaporte, visa o cualquier otro gasto.
Este tipo de estafa tiene como objetivo a personas mayores, mujeres y hombres de entre 40 a 70 años, que tienden a estar solas o para quienes la tecnología no es su fuerte. Buscan que la víctima les transfiera dinero o que les envíe artículos a ciertos domicilios.
En muchos casos, son hombres fingiendo ser militares o ex-militares que necesitan de tu ayuda monetaria para seguir con su vida o para viajar y conocerte. Otro caso reportado es el de mujeres jóvenes que prometen fotos sin ropa a cambio de transferencias monetarias, pero muchas de estas fotografías fueron obtenidas a través de otros esquemas de estafas.
Esta estafa involucra no solo a la plataforma Facebook, sino también a Uber. Este es uno de los esquemas más novedosos que existen actualmente y de los que hay que cuidarse más.
Las víctimas suelen ser personas que están vendiendo algo en Marketplace, como una laptop, desktop, bicicletas, tabletas, accesorios de tecnología, entre otros.
El supuesto cliente buscará comunicarse con el vendedor y mostrarle que está interesado en el producto que vende. Este puede usar un perfil falso en Facebook o robar una cuenta de Facebook real. Cuando el estafador se contacte con el vendedor, buscará que la conversación se traslade a WhatsApp, para “ponerse de acuerdo”.
Durante la conversación en WhatsApp, el estafador dirá que quiere hacer la transacción ese mismo día, que no tiene inconvenientes y que te envía sus credenciales para que no te sientas inseguro. Esas credenciales tienden a ser de un militar o alguien que está estudiando en el colegio militar o de alguna otra persona. Dichos documentos posiblemente fueron robados en algún esquema de phishing o en la estafa de renta de inmuebles.
Lo siguiente será que el estafador mandará comprobantes de que realizó una transferencia a la cuenta bancaria del vendedor, pero si este último revisa su cuenta, el dinero no aparecerá.
En este momento, el criminal llamará al vendedor para decirle que ya hizo la transferencia y que si puede darle su dirección para pasar por el producto que acaba de comprar. Durante la llamada dirá que ya pidió un Uber y que se aproxima al domicilio del vendedor, para que este entregue el producto.
El dinero jamás caerá a la cuenta del vendedor, porque la transferencia es de un cheque sin fondos o porque el comprobante fue alterado con Photoshop. Mientras ocurre la llamada, el estafador presionará a que envíe el producto en el Uber, ya que la transferencia monetaria “no tardará en llegar”. El vendedor procede a entregar el producto, pero el dinero por la transacción jamás será recibido.
Normalmente, aquí suele terminar la estafa, pero también puede ocurrir lo siguiente: alguien más fingiendo ser del SAT o de una institución bancaria se contactará con el vendedor para decirle que hubo un problema con la transferencia bancaria.
Para “liberar el dinero”, el supuesto trabajador del SAT o de la institución bancaria le solicitará hacer una transferencia a otra cuenta bancaria, para que “el dinero se libere”. Sin embargo, esto no pasará, ni el SAT ni las instituciones bancarias te solicitarían jamás una transferencia monetaria por teléfono.
Después de que el vendedor entregó el producto y el dinero para liberar su pago, el estafador amenazará a la víctima con videos violentos para asegurarse de que no se interponga una denuncia. También se amenaza a la víctima por la posesión de información sensible, como su dirección.
Desafortunadamente, la seguridad en Facebook es casi nula. De hecho, puedes contactarte con el soporte de Facebook para reportar un perfil por robo de identidad, extorsión u otras razones, pero la mayoría de las veces Facebook no dará de baja al perfil del estafador. La IA que está detrás de la seguridad de Facebook falla en reconocer los perfiles falsos de la plataforma.
Por lo que si lamentablemente estás leyendo esto después de sufrir una estafa, tienes que realizar lo siguiente:
El conocimiento es poder y si ya conoces estos esquemas de estafa, podrás proteger tu seguridad y tus bienes.