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¿Tu notebook muestra mensajes de error, carga los programas lentamente o se apaga de forma inesperada?
Si bien puede haber varias razones por las que esto sucede, algunas son más serias que otras. Las señales de alerta más comunes que conducen a la reparación de una notebook incluyen:
Cuando la pantalla de tu computador está partida o rota, puede ser devastador, especialmente si lo usas para el trabajo o la escuela. Tu reacción instintiva puede ser comenzar a buscar algunos dispositivos de reemplazo económicos y asequibles para que todo se entregue a tiempo. Y es posible que estés nervioso por la cantidad de dinero que podría terminar costando reparar la pantalla.
Afortunadamente, existen algunas formas de evitar gastar una fortuna en una pantalla nueva y las reparaciones que pueden ser necesarias. Dependiendo del daño, es posible que puedas evitar ir a un taller de reparaciones. Probablemente, sea necesario contratar a un profesional en caso de que tu computador no se pueda salvar, pero muchas veces puedes encontrar la manera de reparar la pantalla tu mismo antes de llevarla a un taller de reparación.
También existe...
Aun teniendo mucho cuidado con tu equipo, a veces puede ser inevitable el encontrarte con situaciones como la de una pantalla agrietada o rota en tu notebook. Sin embargo, el hecho de que tengas problemas con tu pantalla no significa que tu notebook se encuentre del todo perdida.
También debes saber que reparar la pantalla de una notebook no es un trabajo sencillo, y existe la posibilidad de que puedas empeorar el problema, además de anular la garantía del fabricante. Si no confías en tus habilidades para realizar este proceso, te sentirás más tranquilo llevándola a un taller de reparación calificado.
Incluso quienes nunca han reemplazado una pantalla pueden hacerlo, dependiendo del tipo de computador que tengan. Sólo toma en cuenta que si tienes una notebook con pantalla táctil, el proceso puede ser mucho más...
Oprimiste el botón de encendido de tu notebook y no pasó nada.
Hay pocos contratiempos más frustrantes que cuando tu notebook no quiere encender. Sin embargo, no tienes por qué resignarte a la idea de que tu notebook sufrió una muerte prematura. Ahora te enseñaremos algunas maneras de identificar el problema y arreglarlo.
Las causas posibles son un mal suministro eléctrico, un hardware deficiente o un mal funcionamiento del monitor [1]. En muchos casos, puedes resolver el problema tú mismo al reemplazar las partes defectuosas o reconfigurando tu notebook, pero si esta es más vieja y el problema reside en un hardware costoso, podría ser un buen momento para comprarte un computador nuevo. ...