Cómo escoger la mejor GPU para videojuegos

Hay varios componentes que contribuyen a crear la mejor experiencia de juego, pero pocos son tan importantes como la unidad de procesamiento gráfico (GPU, por sus siglas en inglés) de tu computadora, también conocida como tarjeta gráfica o placa de video.

Si bien las mejores opciones harán que tus videojuegos funcionen sin problemas; las placas de menor calidad causarán más frustración de lo que valen. Pero con tantas opciones disponibles, puede ser un poco más complicado para los gamers encontrar la placa adecuada para sus sistemas y para sus presupuestos. Esto también se vuelve más complejo si elegiste construir tu propia PC para gaming.

Es posible que te preocupe tener problemas de compatibilidad o si estás eligiendo la placa adecuada para los títulos que jugás con frecuencia. Debido a que la placa de video que compres probablemente sea el componente más costoso de tu computadora, es crucial que tomes una decisión informada.

A continuación, te ofrecemos algunos consejos para encontrar la mejor placa de video para videojuegos.

La importancia de una placa de video de calidad

Los videojuegos modernos buscan proporcionar una experiencia inmersiva, lo cual es básicamente imposible sin una placa de video. Si bien algunos juegos (generalmente los títulos más antiguos) pueden ejecutarse sin una placa y utilizando solo el CPU, es posible que no se desempeñen como deseás.

Una placa de video quita una presión considerable a tu CPU y controla las imágenes de tu computadora antes de que aparezcan en tu pantalla. Para obtener el mejor rendimiento posible, y especialmente en lo que respecta a videojuegos actuales, una placa de video es absolutamente necesaria. La mayoría de los videojuegos recientes son tan sofisticados que puede ser imposible jugarlos sin una GPU.

En el futuro, la mayoría de los juegos requerirán que tengas algún tipo de placa de video disponible, especialmente porque hay más juegos triple-A (AAA) diseñados para monitores 4K. Incluso si sos un gamer ocasional o jugás títulos que requieren menos gráficos, vale la pena considerar actualizar tu GPU u obtener una placa de video dedicada.

Apegate a un presupuesto

Si bien las placas de video pueden ser caras, invertir en una solución potente significa que es poco probable que tengas que actualizarla en los años siguientes. Dicho esto, la nueva tecnología puede arrojar una clave sobre qué opciones pueden adaptarse mejor a tus necesidades.

Por ejemplo, en agosto, NVIDIA® lanzó una nueva serie de placas de video que están disponibles para las computadoras de escritorio HP NVIDIA y las populares computadoras para gaming HP NVIDIA, que ofrecen una experiencia superior a un precio razonable. Estas placas incluyen la GTX 1050 y la GTX 1080 Ti. También han dado el salto a 4K, lo que significa que un mundo completamente nuevo está abierto tanto para gamers casuales como profesionales.

En cualquier caso, no está de más ahorrar un poco para adquirir la mejor placa de video posible. El costo inicial puede ser alto, pero tener un presupuesto y una idea clara de lo que tendrás que invertir en calidad puede ayudarte a determinar cuánto necesitás ahorrar para obtener lo que deseás, sabiendo que lo disfrutarás durante mucho tiempo.

Investigá acerca de los juegos que planeás jugar

Antes de elegir una GPU, es muy importante conocer los requisitos de los juegos que te interesan. Por ejemplo, para un gamer ocasional que juega títulos menos intensos, una placa de video integrada puede hacer el trabajo de manera adecuada.

Sin embargo, en caso de que puedas invertir un poco de dinero extra, incluso una placa de video de 14,700 ARS puede ser de gran ayuda para que las imágenes sean nítidas y fluidas. Aun así, es posible que tengas algunos problemas para ejecutar juegos más complejos con una placa de ese costo.

Por alrededor de 29,400 ARS, podés comprar una GPU que ejecute juegos en configuraciones medias o altas con una resolución más alta. Este es un compromiso serio para aquellos que no quieren gastar mucho dinero pero quieren una experiencia similar o incluso mejor a la de las consolas de videojuegos.

Algunas de las placas más recomendadas en este nivel de precios incluyen NVIDIA GeForce® GTX 1060 y AMD Radeon™ RX580.

Por supuesto, las opciones de alta gama ofrecen las mejores velocidades de cuadro y rendimiento general. Por 49,000 ARS o más, la GPU ejecutará casi cualquier juego con cualquier tipo de resolución. La NVIDIA GeForce RTX 2080 Ti por 117,667 ARS puede ser una de las opciones más caras disponibles, pero ejecutará los juegos más intensos, incluso en los próximos años.

Una vez más, todo se reduce a qué juegos querés jugar y qué resolución requieren para obtener el mejor rendimiento.

Además, a medida que el mundo gamer comienza a hacer la transición a 4K, deberás tener esto en cuenta si estás buscando una placa de video cuya potencia no disminuya en uno o dos años. También necesitarás una opción de visualización adecuada, de lo cual hablaremos en breve.

También recordá que si estás armando tu propia computadora, podés personalizar otros aspectos que te ayudarán a que una placa de video de menor calidad funcione mejor, como el tipo y la velocidad del procesador que elijas. Por lo general, un procesador de cuatro núcleos como el Intel® Core™ i7 debería ser suficiente para ejecutar sin problemas cualquier placa de video que escojas.

Conocé el tamaño de tu pantalla

Podés tener la mejor placa de video disponible, pero si no tenés el monitor adecuado, los resultados no se verán como los deseás. La mayoría de los gamers probablemente posean un monitor estándar que proporciona una resolución de 1366 x 768 píxeles. Sin embargo, cada vez más usuarios avanzados y gamers están cambiando a opciones 4K (3840 x 2160 píxeles).

Para disfrutar realmente de los beneficios de una nueva placa de video, es posible que también necesites actualizar tu pantalla en los próximos años. En el caso opuesto, es decir que estés considerando un nuevo monitor, tendrás que considerar también qué placa de video funcionará con tu nuevo sistema.

Es probable que en un futuro cercano el 4K se convierta en el nuevo estándar, por lo que si seguís ese camino, es posible que prefieras una placa que funcione con un monitor gaming 4K. Algunas placas más nuevas de NVIDIA y AMD cuentan con tecnología G-Sync o FreeSync, respectivamente. Esta tecnología ofrece intervalos de actualización más rápidos pensados en la resolución 4K.

Tu decisión, por supuesto, depende de tu presupuesto y si estás dispuesto a gastar tanto en una nueva placa de video como en un monitor. Sin embargo, podés optar por actualizar un componente y luego otro en el futuro cuando resulte mejor para tu presupuesto. En cualquier caso, en algún momento necesitarás una pantalla que refleje correctamente la calidad de la placa de video que compraste.

En conclusión

Una placa de video puede mejorar o empeorar tu experiencia con los videojuegos, ya sea que te gusten los juegos RPG o los juegos multijugador en línea.

Puede que sean un poco caras, pero una buena placa de video puede llevar tu experiencia de juego al siguiente nivel. Al apegarte al presupuesto que más te convenga, podés encontrar una opción que te permitirá jugar tus títulos favoritos.